El proceso de reciclaje de plomo es bastante común. Hoy en día, más del 50% de la producción mundial de plomo proviene de fundiciones secundarias del mismo material, siendo la principal materia prima para este proceso las baterías de plomo-ácido y la chatarra de plomo.

El plomo tiene una de las tasas de reciclaje más altas del mundo, también es el metal más reciclado de todos los que se usan comúnmente, mucho más que el cobre, el aluminio o el zinc, esto logra que el reciclaje de plomo se convierta en una contribución significativa al desarrollo sostenible, aliviando la presión sobre los recursos no renovables y reduciendo las emisiones de carbono a través de un método de recuperación simple y energéticamente eficiente.

Así se realiza el reciclaje de plomo

El reciclaje de plomo y, en específico, el de las baterías, se realiza en cuatro fases principales.

En la primera fase del reciclaje de plomo, se reciben las baterías en contenedores o camiones que llegan a la planta en donde se procesan a través del sistema de rotura y separación.

Estas baterías se trituran con un martillo y se pasan a través de un tamiz transportador para limpiar y separar el polvo de óxido de plomo. Después de esto, el plomo y los plásticos se separan en tanques de flotación y fregadero, iniciando el proceso mecánico del reciclaje de plomo. Todo el sistema es un circuito cerrado y el agua se recircula después de pasar por un filtro prensa. También se utiliza un sistema de neutralización de ácido para tratar el agua antes de la recirculación.

Luego, la pasta de plomo que se recolecta en un tanque puede disponerse en el sistema de desulfuración o bombearse a un filtro para deshidratar, desde donde la pasta de plomo se descarga en un área dedicada lista para la fundición.

La pasta se bombea a un tanque de reacción y se combina con el ácido residual recogido en el área de almacenamiento de la batería. La reacción de desulfuración se puede realizar mediante la adición de hidróxido de sodio, carbonato de sodio o bicarbonato de amonio. Luego, se bombea al filtro prensa para deshidratarla y la pasta se descarga en un área dedicada lista para la fundición de plomo.

El próximo paso del reciclaje de plomo será separa el metal de las impurezas en un honor a alta temperatura que permite que el metal se derrita. Posteriormente, el plomo del horno es llamado el plomo duro o crudo y todo se debe ser extraído para luego eliminar las impurezas. Finalmente, la fundición de lingotes de plomo se realiza mediante una máquina de fundición. Los moldes se llenan de plomo puro con una bomba de plomo o mediante válvulas reguladoras de caudal.

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