Desde hace 22 años Fanor Argumedo González sale desde tempranas horas de la mañana a buscar el sustento de su familia gracias a su labor como reciclador, trabajo que desempeña con la “satisfacción” por aportar “un granito de arena” para un mejor manejo de residuos de la ciudad y así contribuir con el medio ambiente.
“Mi labor como reciclador se dignificó gracias al apoyo que recibí del Sena y del Distrito. Todo lo que antes sabía fue por conocimiento propio, pero me llena de orgullo haberme formado para desempeñar esta profesión”, dijo Argumedo.
Contó que antes de recibir el apoyo de la administración distrital debía “empujar”, por largas horas, una carretilla para ir depositando los residuos.
“Me cansaba mucho, pero no paraba. Ahora ya no tengo que empujar nada porque pasan los carros a buscar la basura para nosotros reciclar”, manifestó el integrante de la asociación de recicladores Asorevivir.
Argumedo contó que con las clases del Sena logró aprender a distribuir “correctamente” los residuos, a utilizar los elementos necesarios para su bioseguridad, entre otras cosas.
A su turno, Cecilia Villalobos, jefe del departamento administrativo de Metroreciclar, destacó el impacto “positivo” que ha generado esta estrategia para la labor que desempeñan los recicladores de la ciudad.
“Una de las cosas más importantes es que estas personas cuentan con todos los elementos necesarios, tales como guantes y botas, para no poner en riesgo su seguridad”, sostuvo Villalobos.
Indicó, además, que en la asociación a la que pertenece ya cerca de 80 recicladores han logrado recibir formación y que espera que los 180 faltantes puedan hacerlo el próximo año.
“Hemos trabajado para que los recicladores tengan una capacitación profunda sobre su trabajo porque ellos aprendieron de forma empírica”, añadió.
Agregó que debido a que solo el Sena brinda la capacitación y hay un “sin número” de organizaciones de recicladores, se genera el ingreso por cupos.
Por su parte, Juan Carlos Gómez Vallejo, jefe de la oficina de servicios públicos, indicó que la certificación por competencias que ofrece la Alcaldía de Barranquilla, a través de la Oficina de Servicios Públicos, en alianza con el Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena) consiste en verificar las habilidades, destrezas y conocimientos que tienen para desarrollar un correcto trabajo de aprovechamiento de residuos en la ciudad.
“A la fecha hemos certificado a 540 recicladores de oficio, de las organizaciones asociadas, ubicadas en los diferentes barrios de la ciudad, hasta donde llegan los instructores del Sena”, aseveró Gómez.
El funcionario destacó que esta iniciativa busca el fortalecimiento y la inclusión de los recicladores de oficio en la cadena productiva del aprovechamiento y validar académicamente su labor. De igual forma, agregó que la estrategia cumple con los objetivos planteados en el Plan de Gestión Integral de Residuos (PGRIS).
Para erradicar los basureros a cielo abierto, la oficina de servicios públicos continúa con la instalación de 1.500 cestas públicas de recolección de residuos, durante el último trimestre de 2022, en los principales parques de la ciudad, con el fin de brindar alternativas con mayor capacidad de almacenamiento a los visitantes de estos espacios y disminuir los residuos en espacios públicos.
“El señor alcalde Jaime Pumarejo nos ha encomendado una misión y es trabajar día y noche por la erradicación de los basureros a cielo abierto que se forman en algunas esquinas de la ciudad. Hemos venido trabajando en la identificación, limpieza y erradicación de estos con el apoyo de las mesas de cultura ciudadana y puntos críticos, compuesta por diferentes dependencias de la Alcaldía de Barranquilla, Triple A, Uniautónoma y algunas empresas del sector privado”, añadió Vallejo.
Desde mediados del mes de septiembre inició la adecuación de las cesas, por parte del prestador del servicio, para dar cumplimiento al PGIRS y los parques ‘del realismo mágico, la castellana, Miramar, Insar, Cristo Rey y Puerta Dorada ya tienen disponible el recipiente.